Iralia , la concursante
de la voz niños, ha fallecido víctima del cáncer con solo 11 años y son sus lágrimas
de felicidad , al saberse elegida por los tres entrenadores , lo que me da
esperanzas de que en la vida solo se camina. Es demasiado peso sobre una
espalda tan pequeña, el saberse tocado, pero aún así subía los escalones del
escenario con tanta fuerza que el público empezó a sonreír, llamando la
atención de Bisbal. Ella entonces ya lo sabía, porque la enfermedad rulaba sola
desde cuatro años antes. Lo sabían sus padres y ninguno dijeron nada, en esa
profesión ,que era la suya, donde la gente trepa, por alcanzar los sueños , en
los bigotes de una mosca. Iralia tenía estilo y dignidad y eso siempre queda.
Podría haberse convertido en una adolescente caprichosa y gritona y en una
mujer tranquila y señorial como su madre, pero ahora quedará en el recuerdo
infinito de los pixeles y los fotogramas, eternamente niña. Son buenas noticias
haber cumplido tus sueños, buenas , haber hecho realidad con la edad que sea,
lo que tanto deseabas. Hay buenos sueños y sueños que apestan , pero el de
Iralia solo denotaba frescura e inocencia
, porque ella lo que quería era cantar, como los gorriones y los mirlos y los
canarios, libres y sin ataduras. Ahora Telecinco no saber si emitir su
enlatado, porque ya saben que esto, lo entenderían en la primera edición de la
voz, está ya más que grabado, de ahí los trajes repetidos de los entrenadores, que
hicieron que más de una amiga del face dijera que ya les valía cambiárselos.
La vida seguirá y sus amigas pasarán pagina. No creo que lo hagan nunca
sus padres, ni los que la amaron como ella se merecía, con su ingenuidad y su
dulzura. No son malas noticias una muerte , sino el desenlace de una enfermedad
que siega y fulmina el trascurso de unos años, unas esperanzas de vida y unos
maravillosos sueños…Sueños que Iralia lloró para que todos aquellos que los
viéramos soñáramos con ella, porque los que vemos solo queremos, en la misma
inocencia que ella, que gane el que vale, no el que más venda, el que nos emocione, el que nos haga palpitar
el corazón lo que trascurre en un bostezo de un productor de televisión , mirando
los ránquines de las audiencias. No somos chaqueteros de la vida, ni necrófagos
de noticias truculentas, no disfrutamos sino con la risa y el viento fresco en
la cara , que nos traen gente buena, gente que desaparece , porque la Canina
las siega. Nunca lo entenderé, nunca me será una lección grata, menos aún cuando
no creo en la restitución del depósito de esta , en la otra vida. Por eso,
supongo que me aferró al hoy, a lo que consiguió y creo que son buenas
noticias, que alguien como ella lo consiguiera y que nos demostrase dignidad y
principios , porque no hizo cosecha , como hubieran hecho otros, como muchos
mayores con más cachet y más filón, de su tragedia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario