La hermana de mi amiga
anda mosqueada, porque su cuñado no le gusta un pelo. Ya le advirtió a su
hermana que no se casara con él, pero no le hizo caso, porque le prometió la
luna, pero ahora, hasta ella que es una rendida al amor, se da cuenta de que le
esquilma el dinero para los gastos comunes, que no se ocupa de los niños y que
a sus padres no les trata bien, cuando vienen a visitarlos.
Ya por último, han llegado al twitter de mi amiga unas fotos
comprometidas del cuñado con una mujer desconocida. Eso parece que era lo que
iba a colmar la paciencia de la hermana de mi amiga, pero el cuñado tiene muy
buenos golpes de efecto y ha dado razones de todos los colores para negar la
existencia de esas fotos comprometidas o al menos la mayoría de ellas. Primero dijo, que qué curioso que
aparecieran en el twuiter de su cuñada, que no pude ni verlo. Después, que eso
no probaba nada, porque seguro que era un fotomontaje. Más tarde, que ni
conocía a esa señorita, ni le gustaba un pelo lo que iba por ahí elucubrando su
cuñada. Si no fuese por un tatuaje en el hombro que la hermana conocía bien y
que salía en las fotos y unos calcetines a rayas que le regaló las pasadas
navidades, seguramente lo hubiera creído a pies juntillas, porque aunque la
cuñada mandó a un detective a investigar la procedencia del emisor de las fotos
y parecía que eran mandadas por la señorita de las fotos , que sí que existía y
que lo que quería era sembrar aguas borrascosas para ver si sacaba tajada, la
hermana seguía dudando, más que nada , decía
, por el bien de los niños y las
apariencias, que estaban las cosas muy malas y pensaba que era mejor soportar
cuernos que verse en la calle sin un duro y la vida destrozada. La cuñada se
jalaba de los pelos, sobre todo cuando su cuñado empezó a dudar de su buen
juicio, llamándola parcial y diciendo que tenía novios de todos los colores.“Putero”
lo llamó ella en un tweets y “loca puta” , le respondió él, con todas sus ganas.
La mujer estaba entrando en barrena, por casi cualquier cosa lloraba, le dolían
las piernas y vomitaba, pero cuando ya se encontró en una chaqueta de su marido
un vello púbico ensartado, salió con él
enarbolado entre sus dedos , al encuentro de su marido y allí mismo, en su
despacho, frente a todos , le dijo”..ya me dices ahora mismo de quién este
…”.Iba a decir pelo de chichi , pero le pareció bajo y vulgar, y sofocada, con el pelo en ristre, se dio
media vuelta y fue a llorarle a su hermana. Y así están las cosas, con el pelo
depositado en custodia, esperando análisis de ADN, con la señorita de las fotos
en paradero desconocido y el cuñado , todo sonrosado a parchetones.
Se precisa tener tiempo y una cierta disposición de ánimo para encontrar un vello púbico en la ropa. Lo bueno de cierta edad es que ni lo verías sin gafas. Y no sé si vale la pena el esfuerzo de ponerse gafas para llegar a esa conclusión. No por nada, sino porque, por lo general, cuando se llega a la fase "vello púbico" se han atravesado otras fases igual o más de indicativas.
ResponderEliminarLas relaciones de pareja son siempre complicadas porque dependen del factor suerte principalmente.
Pero el relato está muy bien montado.
Malvivo del cuento, como las pijas, pero en distinta acera.En este caso es pura anécdota de actualidad, lástima no apellidarse Vidal y ser más gráfica, pero si lo soy no me publican y me censuran ipso facto. Gracias , amiga, me encanta que sigas ahí, será que no son tan malos los tiempos que me regalan algo de tu luz.
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